Margot camones maguiña
LA PAPA EN EL MUNDO ANDINO:
es un ser vivo, es sagrada familia, es madre y es resisitencia episémica
es un ser vivo, es sagrada familia, es madre y es resisitencia episémica

Resumen:
Para la comunidad andina, la papa es un ser viviente, es la madre que nos cria, es una semilla sagrada, en este artículo vamos a reflexionar para entender desde el punto de vista ontológico, epistemológico y político. La papa (ch’uqi, unu) en el mundo indígena andino. Lejos de ser un simple alimento, o tuberculo que sacia el hambre del mundo; la papa desafía las lógicas coloniales de la modernidad occidental. Esta reflexión se sostiene en el pensamiento indígena andino en relación a las ideas emergentes anticoloniales.
Introducción
La papa no debe entenderse solo como un cultivo originario de los Andes. Su esencia radica en el significado que se le otorga en cada territorio y comunidad criadora de la semilla sagrada. Esta concepción, desbordan la racionalidad colonial que la considera como un alimento más. En la vida comunitaria, la papa es un runakay, es decir, una persona, que participa de un orden cósmico relacional (Estermann, 1998). Este artículo se propone recuperar el sentido filosófico andino de la papa como ser viviente.
1. La papa es un ser relacional
En el pensamiento andino, el mundo no es el conjunto de objetos, son más bien vínculos o energias que unen. El filósofo quechua-mestizo Josef Estermann (1998), dice que la lógica andina está fundamenta en la relacionalidad, en ella todo ser existe porque se conecta con otros. La papa, en esta idea, no es un vegetal inerte: es una una compañera, a ella se le cultiva con cariño, con música, con reciprocidad (ayni).
Sembrar papa no es una tarea agrícola, es más bien un ritual, ético y espiritual en cada momento: durante la preparación de la chacra, la selección de las semillas, la cosecha, la siembra y la cosecha, está marcada con el vinculo unitario y de coceianza con la Pachamama, con los Apus y los nuestros ancestros (Arnold & Yapita, 2006). Las prácticas comunales revelan formas de ecología sagrada. Esta forma de sentir a la papa, colisiona con la lógica extractiva y antropocéntrica del capitalismo agroindustrial.
2. La papa es un ser viviente
La papa andina, no es solo para comer, sino ella es portadora de una memoria colectiva. Los más de 3,000 variedades cultivadas en los Andes (Centro Internacional de la Papa, 2020), son archivo genético, cultural y simbólico. Para la comunidad andina, cada variedad representa siglos de convivencia entre comunidades humanas y la tierra. La papa se es la semilla que se adapta a muchos microclimas, suelos, alturas y tiempos agrícolas.
De la Cadena (2015) y Rengifo Vásquez (2012), indican que la papa es símbolo de saberes que no se expresan de forma escrita, sino en el cuerpo, en el rito, en la oralidad y en la práctica. En este entender, , descolonizar el saber andino implica empoderar, visibilizar y poner en práctica las formas de crianza del conocimiento para asumir que la semilla misma es texto.
3. La papa y la crítica de la colonialidad del saber
Con la llegada de los españoles y por ende la colonización europea, la papa fue arrancada de su comunidad, su contexto ontológico y convertida en mercancía. Fue domesticada en laboratorios instruentalizafos y sacado de su laboratorio comunal, fue mercantilizada en bolsas y chips, despojada de sus nombres originarios y su relación sagrada, quien come la papa Lays, o papa del pollo solo come un objeto de mercancia, pero olvida su valor afectivo. Con esta mirada la papa se convirtió en “el tubérculo de los pobres” o “el alimento básico”, negando su complejidad relacional (Quijano, 2000).
Este peoceso de extractivismo, la forma como se considera a la papa, sin vida, es una forma de expresión de la colonialidad del saber, porque sólo privilegia los aportes nutritivos de la papa hecho en laboratorio desde la racionalidad eurocéntrica y desacredita el pensamiento, el saber y la convivencia indígena (Mignolo, 2007). Walsh (2009), afirma que, el desafío de la decolonialidad es recuperar todos los sentidos negados por la modernidad, solo así, se podrá reconocer la epistemología de la tierra como válida y necesaria en un mundo coatico en crisis.
4. Decolonizar la papa
Para decolonizar la papa tenemos que reconocer y devolverle su naturaleza ontológica. Es entender que cultivar papa no representa sólo una actividad agrícola, sino un hacer filosófico y político. Es revalorizar las formas de saber y conocimiento local, es comprender la soberanía alimentaria desde la logica comunitaria y no desde la concepción de cosmovisión eurocentrica; sino desde las cosmoconvivencias indígenas como fuentes de vida y resistencia a los cambios de la crisis civilizaroria. Mamani y Rivera Cusicanqui (2010), indican que decolonizar es rehabitar el mundo desde nuestras raíces, sin pedir permiso al canon occidental.
Conclusión
La papa, desde desde la filosofía andina, es mucho más que solo un alimento o tuberculo: es una maestra ancestral, es nuestra madre que como semilla sagrada está relacionada cósmicamente, es símbolo de resistencia. Es aquella que requiere de cuidados y alegrias durante su siembra y cosecha. Su estudio, lejos de la información del imperio del libro y la lógica objetivante, requiere de saber escuchar de manera conectada profundamente. Es una forma de retornar a la tierra y asumir compromisos con la vida en todas sus formas. Es saber criarse y dejarse criar por la naturaleza sagrada del universo que es la Pachamam.
Referencias
Arnold, D. y Yapita, J. (2006). Rutas de la memoria: ch’ixi y complementariedad. Instituto de Lengua y Cultura.
Centro Internacional de la Papa (CIP). (2020). La diversidad genética de la papa en los Andes. https://cipotato.org
De la Cadena, M. (2015). Earth Beings: Ecologies of Practice across Andean Worlds. Duke University Press.
Estermann, J. (1998). Filosofía andina: Sabiduría indígena para un mundo nuevo. Abya-Yala.
Mamani, P. & Rivera Cusicanqui, S. (2010). Ch’ixinakax utxiwa: Una reflexión sobre prácticas y discursos descolonizadores. Tinta Limón.
Mignolo, W. (2007). La idea de América Latina. Gedisa.
Quijano, A. (2000). “Colonialidad del poder, eurocentrismo y América Latina.” CLACSO.
Rengifo Vásquez, G. (2012). Pensamiento de la tierra. Lluvia Editores.
Walsh, C. (2009). Interculturalidad, estado, sociedad: Luchas (de)coloniales de nuestra época. Ediciones Abya-Yala.
Para la comunidad andina, la papa es un ser viviente, es la madre que nos cria, es una semilla sagrada, en este artículo vamos a reflexionar para entender desde el punto de vista ontológico, epistemológico y político. La papa (ch’uqi, unu) en el mundo indígena andino. Lejos de ser un simple alimento, o tuberculo que sacia el hambre del mundo; la papa desafía las lógicas coloniales de la modernidad occidental. Esta reflexión se sostiene en el pensamiento indígena andino en relación a las ideas emergentes anticoloniales.
Introducción
La papa no debe entenderse solo como un cultivo originario de los Andes. Su esencia radica en el significado que se le otorga en cada territorio y comunidad criadora de la semilla sagrada. Esta concepción, desbordan la racionalidad colonial que la considera como un alimento más. En la vida comunitaria, la papa es un runakay, es decir, una persona, que participa de un orden cósmico relacional (Estermann, 1998). Este artículo se propone recuperar el sentido filosófico andino de la papa como ser viviente.
1. La papa es un ser relacional
En el pensamiento andino, el mundo no es el conjunto de objetos, son más bien vínculos o energias que unen. El filósofo quechua-mestizo Josef Estermann (1998), dice que la lógica andina está fundamenta en la relacionalidad, en ella todo ser existe porque se conecta con otros. La papa, en esta idea, no es un vegetal inerte: es una una compañera, a ella se le cultiva con cariño, con música, con reciprocidad (ayni).
Sembrar papa no es una tarea agrícola, es más bien un ritual, ético y espiritual en cada momento: durante la preparación de la chacra, la selección de las semillas, la cosecha, la siembra y la cosecha, está marcada con el vinculo unitario y de coceianza con la Pachamama, con los Apus y los nuestros ancestros (Arnold & Yapita, 2006). Las prácticas comunales revelan formas de ecología sagrada. Esta forma de sentir a la papa, colisiona con la lógica extractiva y antropocéntrica del capitalismo agroindustrial.
2. La papa es un ser viviente
La papa andina, no es solo para comer, sino ella es portadora de una memoria colectiva. Los más de 3,000 variedades cultivadas en los Andes (Centro Internacional de la Papa, 2020), son archivo genético, cultural y simbólico. Para la comunidad andina, cada variedad representa siglos de convivencia entre comunidades humanas y la tierra. La papa se es la semilla que se adapta a muchos microclimas, suelos, alturas y tiempos agrícolas.
De la Cadena (2015) y Rengifo Vásquez (2012), indican que la papa es símbolo de saberes que no se expresan de forma escrita, sino en el cuerpo, en el rito, en la oralidad y en la práctica. En este entender, , descolonizar el saber andino implica empoderar, visibilizar y poner en práctica las formas de crianza del conocimiento para asumir que la semilla misma es texto.
3. La papa y la crítica de la colonialidad del saber
Con la llegada de los españoles y por ende la colonización europea, la papa fue arrancada de su comunidad, su contexto ontológico y convertida en mercancía. Fue domesticada en laboratorios instruentalizafos y sacado de su laboratorio comunal, fue mercantilizada en bolsas y chips, despojada de sus nombres originarios y su relación sagrada, quien come la papa Lays, o papa del pollo solo come un objeto de mercancia, pero olvida su valor afectivo. Con esta mirada la papa se convirtió en “el tubérculo de los pobres” o “el alimento básico”, negando su complejidad relacional (Quijano, 2000).
Este peoceso de extractivismo, la forma como se considera a la papa, sin vida, es una forma de expresión de la colonialidad del saber, porque sólo privilegia los aportes nutritivos de la papa hecho en laboratorio desde la racionalidad eurocéntrica y desacredita el pensamiento, el saber y la convivencia indígena (Mignolo, 2007). Walsh (2009), afirma que, el desafío de la decolonialidad es recuperar todos los sentidos negados por la modernidad, solo así, se podrá reconocer la epistemología de la tierra como válida y necesaria en un mundo coatico en crisis.
4. Decolonizar la papa
Para decolonizar la papa tenemos que reconocer y devolverle su naturaleza ontológica. Es entender que cultivar papa no representa sólo una actividad agrícola, sino un hacer filosófico y político. Es revalorizar las formas de saber y conocimiento local, es comprender la soberanía alimentaria desde la logica comunitaria y no desde la concepción de cosmovisión eurocentrica; sino desde las cosmoconvivencias indígenas como fuentes de vida y resistencia a los cambios de la crisis civilizaroria. Mamani y Rivera Cusicanqui (2010), indican que decolonizar es rehabitar el mundo desde nuestras raíces, sin pedir permiso al canon occidental.
Conclusión
La papa, desde desde la filosofía andina, es mucho más que solo un alimento o tuberculo: es una maestra ancestral, es nuestra madre que como semilla sagrada está relacionada cósmicamente, es símbolo de resistencia. Es aquella que requiere de cuidados y alegrias durante su siembra y cosecha. Su estudio, lejos de la información del imperio del libro y la lógica objetivante, requiere de saber escuchar de manera conectada profundamente. Es una forma de retornar a la tierra y asumir compromisos con la vida en todas sus formas. Es saber criarse y dejarse criar por la naturaleza sagrada del universo que es la Pachamam.
Referencias
Arnold, D. y Yapita, J. (2006). Rutas de la memoria: ch’ixi y complementariedad. Instituto de Lengua y Cultura.
Centro Internacional de la Papa (CIP). (2020). La diversidad genética de la papa en los Andes. https://cipotato.org
De la Cadena, M. (2015). Earth Beings: Ecologies of Practice across Andean Worlds. Duke University Press.
Estermann, J. (1998). Filosofía andina: Sabiduría indígena para un mundo nuevo. Abya-Yala.
Mamani, P. & Rivera Cusicanqui, S. (2010). Ch’ixinakax utxiwa: Una reflexión sobre prácticas y discursos descolonizadores. Tinta Limón.
Mignolo, W. (2007). La idea de América Latina. Gedisa.
Quijano, A. (2000). “Colonialidad del poder, eurocentrismo y América Latina.” CLACSO.
Rengifo Vásquez, G. (2012). Pensamiento de la tierra. Lluvia Editores.
Walsh, C. (2009). Interculturalidad, estado, sociedad: Luchas (de)coloniales de nuestra época. Ediciones Abya-Yala.