alfonzo valderrama gonzález
CEFERINA
Mujer de pelos largos, negro oscuro
tras tus caricias, cantando a tu corazón los recuerdos me golpean en el cerebro los gritos de los comuneros con tesón. La alegría de los niños, también su sufrir al bajar por las laderas de Huaychaupunta, como traídas por el viento, para asistir a la escuela. Difíciles años del setenta. Al terminar la faena del local comunal, no obstante haber trabajado sin almorzar, las mujeres con su arahui como en carnaval, alegraban a sus esposos con su converzar. Mujer de ojos alegres, claros, serenos de tus entrañas va brotando la mulisa de tu corazón, de tus labios pequeños el elixir de la vida, como de la musa. Gritos de protesta, cantos de alturas coro de las almas, coro de las santas de injusticias, de penurias, de miserias encontraron en tus cantos respuestas. ¡Oh compañera esposa!, conmigo desterrada para sacar de la ignominia al niño andino por enseñarles la verdad, eres perseguida por cantar a la justicia, como Juana Moreno. Canta Ceferina, entónalos con amor cariñito esas notas que desnudan a las injusticias, en este pueblo olvidado, en este laberinto al que llegaste, no se por qué circunstancias. Tú comprendes mejor los problemas de Choras, por que allí te iniciaste como maestra serrana, en esa tierra de Yarowilcas, en esas alturas es eso lo que inspira tu canto, maestra Ceferina. 1977 13vo. poemaa. Poemario Tiempos de Vivir. |
Alfonzo Valderrama gonzález