ALEX MILLA CURI
RECORDANDO A MI COLEGIO C.C.B. CHIQUIÁN
“Extrañar no es olvidar, es recordar y en el recuerdo volver a vivir”.
Hace muchos años que no estoy en mi colegio y parece que fue ayer todo lo que viví dentro de él. Parce como si el tiempo se hubiese detenido por unos instantes y mis ojos volverán a ver cada imagen impregnada en mi mente de quienes son personajes del colegio: las autoridades, nuestros profesores y nosotros; los que hemos egresado y los que aún están estudiando.
Y la vida, mientras pasa y sigue, aún brinda oportunidades para poder expresarles lo que siento y decirle en estas líneas lo que se extraña al colegio cuando se está fuera. Extrañar no es olvidar, es recordar y en el recuerdo volver a vivir: los amigos, las tareas, las temibles pruebas, y si algún profesor caía bien otro no.
El mundo era nuestro colegio, si pudiera contar cada uno de las aventuras que vivimos con nuestros compañeros desde la primaria: jugar por los patios, y recitar poesías un lunes por la mañana, por ejemplo. Y en la secundaria la situación se complicaba porque las responsabilidades eran mayores.
Uno crece, pero siempre sigue teniendo ese espíritu travieso de todo adolescente. Quien diga lo contrario, no ha vivido todavía.
Hoy que estoy en una institución del pueblo aún más a mi colegio, pues sus enseñanzas fueron el cimiento de mi formación y preparación académica. Si tuviera que dar las gracias, no sabría por dónde empezar porque fueron esos profesores que ahora los tienen entre ustedes los que orientaron mis metas y decisiones.
Sigan adelante y vivan cada minuto en nuestro querido colegio: cada examen, broma, y conversaciones entre sus compañeros y maestros, que les aseguro que cuando estén fuera la vida será de otra manera y los retos serán mayores.
*Recuerdo a la Promoción CCB 99 “Pedro Paulett”
Hace muchos años que no estoy en mi colegio y parece que fue ayer todo lo que viví dentro de él. Parce como si el tiempo se hubiese detenido por unos instantes y mis ojos volverán a ver cada imagen impregnada en mi mente de quienes son personajes del colegio: las autoridades, nuestros profesores y nosotros; los que hemos egresado y los que aún están estudiando.
Y la vida, mientras pasa y sigue, aún brinda oportunidades para poder expresarles lo que siento y decirle en estas líneas lo que se extraña al colegio cuando se está fuera. Extrañar no es olvidar, es recordar y en el recuerdo volver a vivir: los amigos, las tareas, las temibles pruebas, y si algún profesor caía bien otro no.
El mundo era nuestro colegio, si pudiera contar cada uno de las aventuras que vivimos con nuestros compañeros desde la primaria: jugar por los patios, y recitar poesías un lunes por la mañana, por ejemplo. Y en la secundaria la situación se complicaba porque las responsabilidades eran mayores.
Uno crece, pero siempre sigue teniendo ese espíritu travieso de todo adolescente. Quien diga lo contrario, no ha vivido todavía.
Hoy que estoy en una institución del pueblo aún más a mi colegio, pues sus enseñanzas fueron el cimiento de mi formación y preparación académica. Si tuviera que dar las gracias, no sabría por dónde empezar porque fueron esos profesores que ahora los tienen entre ustedes los que orientaron mis metas y decisiones.
Sigan adelante y vivan cada minuto en nuestro querido colegio: cada examen, broma, y conversaciones entre sus compañeros y maestros, que les aseguro que cuando estén fuera la vida será de otra manera y los retos serán mayores.
*Recuerdo a la Promoción CCB 99 “Pedro Paulett”
Alex Milla Curi
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