JOSÉ ANTONIO SALAZAR MEJÍA
UN HERODES ESPAÑOL
Versión del historiador ancashino César Álvarez-Brun. Recogida hacía 1990
La Navidad, que es una fiesta de regocijo infantil, nos trae con la historia del rey Herodes, un capítulo vergonzoso de la historia universal. Cuentan los evangelios que Herodes ordenó la muerte de todos los niños menores de dos años en Belén y sus alrededores, con la pretensión de deshacerse del recién nacido Jesús, para evitar que tome su trono. ¿Cuántos serían los niños asesinados? No se precisa el número en las Sagradas Escrituras. Estudiosos del tema aseveran que el número de mártires inocentes fluctuaría entre treinta y sesenta, puesto que Belén en ese tiempo era una pequeña aldea. La cantidad no el lo que importa, el hecho es realmente execrable.
¿Cómo sucedieron estos horribles hechos? En 1534, Pizarro entregó la Encomienda de Lurin Huaylas a Sebastián de Torres, escribano de la conquista, quien estuvo presente en Cajamarca. La Encomienda de Hanan Huaylas, Pizarro se la reservó para sí, toda vez que fue la tierra de su suegra, la Curaca Kuntuy Huacho, madre de Quispe Sisa, su esposa india, a quién bautizó con el nombre de Inés Huaylas Yupanqui.
En 1539, Sebastián de Torres es asesinado por los indios de Conchucos a causa de sus tropelías y abusos. Pizarro, para escarmentar a los alzados envía al capitán Francisco de Chávez. A este bárbaro español no se le ocurrió mejor idea que tocar donde más duele, ordenó matar a cientos de niños para vengar la muerte del Encomendero.
La reacción de la corona fue de una gran indignación, aunque el castigo llegó cuando ya había muerto el vil asesino. El emperador Carlos V ordenó por Real Cédula emitida expresamente el Día de Navidad del año 1551, que de la encomienda que fuera de Francisco de Chávez se diera de comer y vestir a cien niños y se funde una escuela para ellos.
¿Cómo murió Francisco de Chávez? Bien dice el dicho: el que a hierro mata a hierro muere. Chávez fallece junto a Pizarro, el día en que este fue asesinado por los almagristas. Su memoria quedará grabada como la de un personaje que opacó al bíblico asesino de los santos inocentes.
La Navidad, que es una fiesta de regocijo infantil, nos trae con la historia del rey Herodes, un capítulo vergonzoso de la historia universal. Cuentan los evangelios que Herodes ordenó la muerte de todos los niños menores de dos años en Belén y sus alrededores, con la pretensión de deshacerse del recién nacido Jesús, para evitar que tome su trono. ¿Cuántos serían los niños asesinados? No se precisa el número en las Sagradas Escrituras. Estudiosos del tema aseveran que el número de mártires inocentes fluctuaría entre treinta y sesenta, puesto que Belén en ese tiempo era una pequeña aldea. La cantidad no el lo que importa, el hecho es realmente execrable.
- ¿Esto se celebra el 28 de diciembre…?
- Claro. La fecha es conocida por el Calendario Litúrgico como el Día de los Inocentes.
¿Cómo sucedieron estos horribles hechos? En 1534, Pizarro entregó la Encomienda de Lurin Huaylas a Sebastián de Torres, escribano de la conquista, quien estuvo presente en Cajamarca. La Encomienda de Hanan Huaylas, Pizarro se la reservó para sí, toda vez que fue la tierra de su suegra, la Curaca Kuntuy Huacho, madre de Quispe Sisa, su esposa india, a quién bautizó con el nombre de Inés Huaylas Yupanqui.
- Me habéis servido hidalgamente como garante notarial en esta empresa de la conquista de aqueste reyno. Po ello os doy el privilegio de tomar la encomienda que esta vecina a la mía, don Sebastián. – Le decía el futuro marqués.
- ¡Gran honor que me hace vuecemerced! -Retrucaba acaremelado el susodicho.
- Ved que va engalanada de muy buenas tierras y excelente ganado.
- Lo que se agradece sobremanera, mi muy seor don Francisco. Sabré daros buena cuenta de vuestro encargo.
En 1539, Sebastián de Torres es asesinado por los indios de Conchucos a causa de sus tropelías y abusos. Pizarro, para escarmentar a los alzados envía al capitán Francisco de Chávez. A este bárbaro español no se le ocurrió mejor idea que tocar donde más duele, ordenó matar a cientos de niños para vengar la muerte del Encomendero.
- ¡A ver si así experimentáis, salvajes! – Solía repetir el temible represor. -Agora lo pensareis dos veces antes de atacar a un hidalgo venido de las Españas.
- ¿pero no era que los cusqueños fueron los únicos que se levantaron en contra de los españoles?
- ¡Vaya usted a informarse bien de nuestra historia!
La reacción de la corona fue de una gran indignación, aunque el castigo llegó cuando ya había muerto el vil asesino. El emperador Carlos V ordenó por Real Cédula emitida expresamente el Día de Navidad del año 1551, que de la encomienda que fuera de Francisco de Chávez se diera de comer y vestir a cien niños y se funde una escuela para ellos.
¿Cómo murió Francisco de Chávez? Bien dice el dicho: el que a hierro mata a hierro muere. Chávez fallece junto a Pizarro, el día en que este fue asesinado por los almagristas. Su memoria quedará grabada como la de un personaje que opacó al bíblico asesino de los santos inocentes.
- ¿O sea que Chávez debe estar achicharrándose en el infierno?
- Cual moderno pollo a la brasa. Ni más ni menos.