Rimay cÓNDOR
Apreciado lector:
Buscando información relevante a nuestra tierra encontré esta interesante nota, referente al poblado de Pomapata, escrita por el Sr. David Cruz Rubina, la cual me complazco en presentarles al igual que un precioso poema de su inspiración sobre la tierra pomapatina.
Rimay Cóndor
Buscando información relevante a nuestra tierra encontré esta interesante nota, referente al poblado de Pomapata, escrita por el Sr. David Cruz Rubina, la cual me complazco en presentarles al igual que un precioso poema de su inspiración sobre la tierra pomapatina.
Rimay Cóndor
¿ QUIÉN FUNDÓ POMAPATA ?
Ante la pregunta ¿Quién fundó Pomapata ? Intento responder, diciendo que fue fundado por la familia Jacha. El primero en ocupar el lugar fue Martín Jacha, quien tuvo 4 hijos, pero el que permaneció en el lugar fue Gregorio Jacha y su esposa Lorenza Valdez, padres de Braulio, Margaro, Ciro y Octavia Jacha (mi abuela por la línea materna) Los fundamentos que sustentan esta teoría son:
1.-Desde la perspectiva urbanística, sus casas son las más antiguas y están en la parte céntrica del pueblo.
2.-Las chacras que tienen agua permanente, que rodean al pueblo, son de la familia Jacha, actualmente en poder de una bisnieta, que las conserva como un legado histórico familiar.
3.-El apellido Jacha es un término quechua, que significa rama. El idioma materno de esta familia era el quechua y por eso todos los lugares que rodean al pueblo, incluyendo al mismo pueblo, fueron bautizados con nombres quechuas: Pumapata o Pumapatay (pata o patería de pumas),actualmente denominado Pomapata, Jircán (lugar donde ruedan las piedras), Cónoc (agua caliente), Pucallpa (tierra colorada), Jatumpampa (pampa grande), Cashacorral (corral de espinas), Pashpa (tierra movediza), Jircacancha (abundancia de piedras), Yuracyacu (agua cristalina), etc.
4.-Los apellidos de los demás habitantes del pueblo son: Rubina, Cruz, Valderrama, Alejandro, Huerta, Palomino, Gonzalo, Gonzales, Cano, Atanacio, Blas, Antaurco, Curo, Pardavé, Aguirre, Jara, Mejía, Gaytán, etc. Estas familias habrían llegado de diferentes lugares, después de la fundación del pueblo, porque ninguno de ellos es apellido quechua.
1.-Desde la perspectiva urbanística, sus casas son las más antiguas y están en la parte céntrica del pueblo.
2.-Las chacras que tienen agua permanente, que rodean al pueblo, son de la familia Jacha, actualmente en poder de una bisnieta, que las conserva como un legado histórico familiar.
3.-El apellido Jacha es un término quechua, que significa rama. El idioma materno de esta familia era el quechua y por eso todos los lugares que rodean al pueblo, incluyendo al mismo pueblo, fueron bautizados con nombres quechuas: Pumapata o Pumapatay (pata o patería de pumas),actualmente denominado Pomapata, Jircán (lugar donde ruedan las piedras), Cónoc (agua caliente), Pucallpa (tierra colorada), Jatumpampa (pampa grande), Cashacorral (corral de espinas), Pashpa (tierra movediza), Jircacancha (abundancia de piedras), Yuracyacu (agua cristalina), etc.
4.-Los apellidos de los demás habitantes del pueblo son: Rubina, Cruz, Valderrama, Alejandro, Huerta, Palomino, Gonzalo, Gonzales, Cano, Atanacio, Blas, Antaurco, Curo, Pardavé, Aguirre, Jara, Mejía, Gaytán, etc. Estas familias habrían llegado de diferentes lugares, después de la fundación del pueblo, porque ninguno de ellos es apellido quechua.
SEG SEG
Quise borrarte de mi mente
pero no he podido,
Quise arrancarte de mi corazón
pero no he logrado.
Hoy, más que nunca,
vives en mi recuerdo,
Seg Seg querido.
Cómo olvidarte,
si me marcaste el rostro,
con tinta indeleble.
Cómo olvidarte,
si me arrancaste la ropa,
con tus rebeldes carcarillos.
Cómo olvidarte,
si saciaste mi hambre,
con tus frutas silvestres.
Hoy, más que nunca,
vives en mi recuerdo,
Seg Seg querido.
(Foto: Ider Jacha)
Quise borrarte de mi mente
pero no he podido,
Quise arrancarte de mi corazón
pero no he logrado.
Hoy, más que nunca,
vives en mi recuerdo,
Seg Seg querido.
Cómo olvidarte,
si me marcaste el rostro,
con tinta indeleble.
Cómo olvidarte,
si me arrancaste la ropa,
con tus rebeldes carcarillos.
Cómo olvidarte,
si saciaste mi hambre,
con tus frutas silvestres.
Hoy, más que nunca,
vives en mi recuerdo,
Seg Seg querido.
(Foto: Ider Jacha)