alfonzo valderrama gonzález
POEMA
Estos poemas nacieron dentro de mi alma,
rememorando hechos de mis días de lucha, de un muchacho ansioso por subir a la cima, de los montes, de los nevados de Conococha. Llegaron en diciembre, al terminar la secundaria, al tener un desencanto de los estudios hechos, al recuperar mi mente lucidez, también alegría, causaron anhelo, admiración, en los muchachos. Desde entonces ha pasado mucho tiempo, cada semestre, cada año, busco consejos, para perfeccionar mi estilo en este campo, escribiendo estos poemas para mis antojos. He dejado mis añoranzas de estudiante cristiano, para convertirme en compositor desde la realidad, resumiendo, los acontecimientos desde lo cotidiano, haciendo poemas de contenido y también de calidad. Desde la Primaria, siendo todavía niño, entre las estrechas calles de mi pueblo, escribía estrofas de versos con cariño, para la chica que me seguía en mi periplo. Recibí los consejos de mis maestros, sus sermones, que al recitar los versos de Gustavo Adolfo Becker me decían: Algún día serás poeta, de los mejores, continúa con dedicación, llegarás ser otro Becker. Desde entonces escribo, hago que se besen el día con la noche, la alegría con la tristeza, hago también que los muchachos se lancen a conquistar sus parejas, con mucha sutileza. Algunos me dicen: Tus poemas resucitan muertos, convence a los incrédulos, también a los resentidos. Sólo sé que mis poemas siempre nacen contentos, que, en mi Patria, el Perú, tendrán que ser recitados. 2001. |
Alfonzo Valderrama González