norka sulema brios ramos
CUANDO LOS VIENTOS SOPLAN
ES CUANDO LA MEMORIA JUEGA CON LOS RECUERDOS
ES CUANDO LA MEMORIA JUEGA CON LOS RECUERDOS
Noviembre, penúltimo mes del año, con pandemia.
Dicen que el que se va se lleva su memoria,
su modo de ser río, de ser viento y de ser un adiós.
CUANDO LLAMAN LAS CAMPANAS, LOS VIENTOS DANZAN.-
Una roca viene a mi memoria, con el sonido singular de una campana me ponía a leer sobre la plataforma de una peña que era el techo de una gran cueva que mi padre lo convirtió en un cuarto de depósitos. Le puso pared y puerta para madurar los quesos, la mantequilla y los requesones en épocas de vaquería en los potreros del bosque de Ashau. Por causalidad tiré una piedra hacia un fruto silvestre que se veía muy apetitosa. Era un tumo que colgaba sobre esta roca azulada. Por mi mala puntería cayó la piedra sobre la roca y me pareció escuchar un sonido de campana. Para salir de dudas nuevamente tiré, pero esta vez a la misma roca. Se repitió el sonido. No había duda, era la roca azulada la que tenía ese sonido. Tiré más y más y escuché el eco. Le comenté a mi padre quien me dijo hay muchos lugares con ese sonido en la parte más alta donde estaba Ashau, la querencia de mis padres de bosques y duendes de ensueño. Vi que no le dio importancia. Cuando retorné en otras vacaciones escolares ya no estaba la roca, había desaparecido y la chacra para el cultivo estaba más agrandada. Me dijeron que la dinamitaron. Sentí nostalgia la había adoptado como mi roca favorita. Pensé buscar otra y escalar el cerro pero ya no regrese más.
La Historia Enriquece la Mente:-Todo empieza con una sola palabra AMOR , que implica todo y descubre en estos relatos vivenciales de hechos y costumbres que se van desgranando como maíz corpanquino que contienen vivencias a través de los años que darán vida hasta convertirse en historia que ´solo el que ha vivido puede contar tal cual.
Porque escribir relatos y acontecimientos de hechos reales, es una de las maneras puras de reivindicar las emociones de lo vivido de un pueblo, ponernos en contacto nos hace humanos.
Esta columna es el espacio de encuentro del pasado con el presente, para escribir, aprender es disfrutar en compañía del camino relatar con la escritura es recorrer las líneas del tiempo.
Cuando Llaman las Campanas:-- San Miguel de Corpanqui es un pueblo mágico, con mucha riqueza histórica, tradiciones y costumbres dónde se da el llamado de las campanas que comunican por medio del toque cada acontecimiento porque es diferente cada sonido y más rápido de comunicar a toda la población, sabíamos decir: “Las campanas están llamando o las campanas nos están avisando" era como nuestro reloj biológico donde nos servía de guía.
Las campanas llaman con diferentes tonalidades para ir a la escuela cuando llegan visitas importantes o autoridades, cuando hay una reunión acuerdos de los comuneros, en fiestas patrias , navidad y año nuevo etc. para ir a la misa, a las novenas, rezos y cuando alguien se va al otro plano éste último es tan lastimero, el sonido que al escucharlo se hace una plegaria para el alma del que acaba de fallecer. Es una forma de estar enterados de todo lo que acontece del día a día.
EL LAVADO DE ROPA DE LOS MUERTOS:-
Son tradiciones que se repiten siempre cuando alguien fallece. Después del entierro al siguiente día se carga sobre un burro toda la ropa del muerto camino hacia el río Jatunmay (río grande) a fueras del pueblo, todos acompañan a los deudos llevando mazos y jabones para lavar la ropa en el mismo río con charlas recordando hazañas y por ahí no falta el trago corto de un calientito , unos metros antes del río había un sillón donde los caminantes descansan de su trajín, este sillón hecho por la Madre Naturaleza lo llamaban el "Sillón del Muerto" durante el lavado de la ropa del muerto se sabía colocar el sombrero , una bufanda, o poncho si era varón y si era mujer un sombrero y pañolón, que es lo que usa la mujer corpanquina, decían desde ese punto el muerto observaba a los que habían ido al lavado de sus ropas, o sea estaba pasando lista como se diría y al que no iba en la noche les jalaba los pies como decían ellos es el jalado de patas. Algunos familiares a veces en alguna ocasión esto era del antojo contrataban al arpista viene a mi memoria el Sr. Crecencio arpista famoso muy solicitado para todo evento acompañaba con la música que le gustaba en vida al fallecido.
Ya al terminar el lavado de ropas y cargado sobre el lomo del burro se inicia el retorno al pueblo, los participantes se ponían a jugar al toreo donde los hombres hacían de toreros con sus ponchos o casacas y las mujeres a de vaca, estas ya iban bien preparadas llevaban cuernos de toros o dos palos para atacar a los toreros justo en la parte donde se les antojaba muchos resultaban en el piso bien revolcados por tanta corneada ya estando shinca, shinca o medio mareaditos ( a veces eran mareados adrede por la interesada )y no se podían defender eran presa fácil de las vacas esto es de la mujeres quienes iracundas se lanzaban y se aprovechaban para cobrarse algún pendiente que tenían por ahí o también algún interés personal o simplemente por pura diversión.
Al llegar a la casa todos expectantes esperaban con mucha curiosidad para ver las huellas que dejo el muerto al salir para irse al otro mundo sobre la ceniza cernida finamente sobre el piso junto a la puerta antes de cerrar la puerta asegurada con candado donde nadie podía entrar prácticamente quedaba sola la casa, para que el muerto pueda despedirse , al ver la ceniza entonces ellos descifraban lo siguiente si era las huellas de una paloma el alma del muerto fue al cielo , si era la huella de un gallo se fue al purgatorio y si es de un cabrito se fue al infierno, luego venia el comentario por días y semanas hasta que por fin se olvidaron. yo vi huellas de paloma pero nunca de un cabrito, tal vez alguna vez vi las huellas de un ratón.
Así es el folklore de un pueblo que queda en la memoria.
Norka Zulema Brios Ramos
Comunicadora Social. SUTPECOS.
Dicen que el que se va se lleva su memoria,
su modo de ser río, de ser viento y de ser un adiós.
CUANDO LLAMAN LAS CAMPANAS, LOS VIENTOS DANZAN.-
Una roca viene a mi memoria, con el sonido singular de una campana me ponía a leer sobre la plataforma de una peña que era el techo de una gran cueva que mi padre lo convirtió en un cuarto de depósitos. Le puso pared y puerta para madurar los quesos, la mantequilla y los requesones en épocas de vaquería en los potreros del bosque de Ashau. Por causalidad tiré una piedra hacia un fruto silvestre que se veía muy apetitosa. Era un tumo que colgaba sobre esta roca azulada. Por mi mala puntería cayó la piedra sobre la roca y me pareció escuchar un sonido de campana. Para salir de dudas nuevamente tiré, pero esta vez a la misma roca. Se repitió el sonido. No había duda, era la roca azulada la que tenía ese sonido. Tiré más y más y escuché el eco. Le comenté a mi padre quien me dijo hay muchos lugares con ese sonido en la parte más alta donde estaba Ashau, la querencia de mis padres de bosques y duendes de ensueño. Vi que no le dio importancia. Cuando retorné en otras vacaciones escolares ya no estaba la roca, había desaparecido y la chacra para el cultivo estaba más agrandada. Me dijeron que la dinamitaron. Sentí nostalgia la había adoptado como mi roca favorita. Pensé buscar otra y escalar el cerro pero ya no regrese más.
La Historia Enriquece la Mente:-Todo empieza con una sola palabra AMOR , que implica todo y descubre en estos relatos vivenciales de hechos y costumbres que se van desgranando como maíz corpanquino que contienen vivencias a través de los años que darán vida hasta convertirse en historia que ´solo el que ha vivido puede contar tal cual.
Porque escribir relatos y acontecimientos de hechos reales, es una de las maneras puras de reivindicar las emociones de lo vivido de un pueblo, ponernos en contacto nos hace humanos.
Esta columna es el espacio de encuentro del pasado con el presente, para escribir, aprender es disfrutar en compañía del camino relatar con la escritura es recorrer las líneas del tiempo.
Cuando Llaman las Campanas:-- San Miguel de Corpanqui es un pueblo mágico, con mucha riqueza histórica, tradiciones y costumbres dónde se da el llamado de las campanas que comunican por medio del toque cada acontecimiento porque es diferente cada sonido y más rápido de comunicar a toda la población, sabíamos decir: “Las campanas están llamando o las campanas nos están avisando" era como nuestro reloj biológico donde nos servía de guía.
Las campanas llaman con diferentes tonalidades para ir a la escuela cuando llegan visitas importantes o autoridades, cuando hay una reunión acuerdos de los comuneros, en fiestas patrias , navidad y año nuevo etc. para ir a la misa, a las novenas, rezos y cuando alguien se va al otro plano éste último es tan lastimero, el sonido que al escucharlo se hace una plegaria para el alma del que acaba de fallecer. Es una forma de estar enterados de todo lo que acontece del día a día.
EL LAVADO DE ROPA DE LOS MUERTOS:-
Son tradiciones que se repiten siempre cuando alguien fallece. Después del entierro al siguiente día se carga sobre un burro toda la ropa del muerto camino hacia el río Jatunmay (río grande) a fueras del pueblo, todos acompañan a los deudos llevando mazos y jabones para lavar la ropa en el mismo río con charlas recordando hazañas y por ahí no falta el trago corto de un calientito , unos metros antes del río había un sillón donde los caminantes descansan de su trajín, este sillón hecho por la Madre Naturaleza lo llamaban el "Sillón del Muerto" durante el lavado de la ropa del muerto se sabía colocar el sombrero , una bufanda, o poncho si era varón y si era mujer un sombrero y pañolón, que es lo que usa la mujer corpanquina, decían desde ese punto el muerto observaba a los que habían ido al lavado de sus ropas, o sea estaba pasando lista como se diría y al que no iba en la noche les jalaba los pies como decían ellos es el jalado de patas. Algunos familiares a veces en alguna ocasión esto era del antojo contrataban al arpista viene a mi memoria el Sr. Crecencio arpista famoso muy solicitado para todo evento acompañaba con la música que le gustaba en vida al fallecido.
Ya al terminar el lavado de ropas y cargado sobre el lomo del burro se inicia el retorno al pueblo, los participantes se ponían a jugar al toreo donde los hombres hacían de toreros con sus ponchos o casacas y las mujeres a de vaca, estas ya iban bien preparadas llevaban cuernos de toros o dos palos para atacar a los toreros justo en la parte donde se les antojaba muchos resultaban en el piso bien revolcados por tanta corneada ya estando shinca, shinca o medio mareaditos ( a veces eran mareados adrede por la interesada )y no se podían defender eran presa fácil de las vacas esto es de la mujeres quienes iracundas se lanzaban y se aprovechaban para cobrarse algún pendiente que tenían por ahí o también algún interés personal o simplemente por pura diversión.
Al llegar a la casa todos expectantes esperaban con mucha curiosidad para ver las huellas que dejo el muerto al salir para irse al otro mundo sobre la ceniza cernida finamente sobre el piso junto a la puerta antes de cerrar la puerta asegurada con candado donde nadie podía entrar prácticamente quedaba sola la casa, para que el muerto pueda despedirse , al ver la ceniza entonces ellos descifraban lo siguiente si era las huellas de una paloma el alma del muerto fue al cielo , si era la huella de un gallo se fue al purgatorio y si es de un cabrito se fue al infierno, luego venia el comentario por días y semanas hasta que por fin se olvidaron. yo vi huellas de paloma pero nunca de un cabrito, tal vez alguna vez vi las huellas de un ratón.
Así es el folklore de un pueblo que queda en la memoria.
Norka Zulema Brios Ramos
Comunicadora Social. SUTPECOS.
EL QUIJOTE
Los molinos de viento se agitan como sombras en tiempos de pandemia, como susurros callados cual sueños de Quijote. Aún tengo bien marcados mis anhelos de gaviota, persiguiendo al viento con locura y cordura, voy esquivando las astas crueles que depara el destino. Son los molinos iracundos que acechan mi sosiego de pastora de sueños azules, cual zagal jacarandoso. Es el Yerupajá que brilla su libertad en los andes bolognesinos me exalta a no dejar de soñar en libertad, a brillar como su blancacura a no envejecer con la mente a volar y atrapar mis sueños con entusiasmo no rendirme jamas. NOBRIRA Poemario "Sueños de Viento" |
AMARILLANDO
Por caminos de mi tierra ancashina adornada de retamas amarillando voy recorriendo valles y cumbres sembrando emociones y versos. En cada tramo me perfuman las retamas. dejo mis ayes a la luna que iluminan mi camino de mis pasos seguros, Me asechan los recuerdos de tiempos de antaño del maíz y del trigo pelado que ya están amarillando con el sol. Los pensamientos aceleran el latir del corazón azul gitano , cual caminante. me llaman porque no dejo de caminar gritan propios y extraños,dejo que lo hagan. Tan sólo soy un instante en ésta vida por eso a las penas los tiro al viento, para que laben con su aliento y amarillen . No me duele esta trova porque voy bailando cantando y silbando por los caminos , en mi sombrero llevo flores amarillando. en mis labios una sonrisa, en mi mirada va reflejada tu paisaje, en mis manos una caricia en mis brazos un abrazo fraterno y en mi corazón la fe a Dios. Nobrira Poemario:Sueños de Viento. |
LINEAS ROTAS
En estos tiempos de pandemia finjo sensatés y cordura, con amigos que no los veo en el palpitar del corazón. Engaño a mi poética demencia dónde va mi pensamiento genuino van sobrepasando los linderos donde la sangre fluye y mi ego reniega de mis actos y de mis letras mal escritas, mal delineadas y de mis versoso dispersos. Te digo que no me peretenecen porque son sueños impuestos paradigmas que no son de mi pluma ni de mi lucidez que ocultan tras la lumbre de mis versos dormidos en mi alma viajera, entre balbuceos de corales en la lejanía nace una ninfa bolognesina con alma de luna. Nobrira. Poemario:Sueños de Viento. |