ARMANDO ZARAZÚ ALDAVE
SIGUE LA PESADILLA
Cuando pensábamos que poco a poco la peste iba cediendo, vemos con bastante alarma por cierto que esta sigue atacando con mayor fuerza en todo el mundo. La ilusión de la vacuna, al menos para los peruanos, sigue siendo esa, una ilusión. Los gobernantes y todos aquellos con hambre de poder se han olvidado de lo más esencial, mostrar genuina preocupación por la salud de sus compatriotas.
En 1947, el genial Albert Camus publicó su novela titulada “La peste”. La historia está ubicada en la ciudad argelina de Orán, la cual es asolada por una terrible epidemia que va acabando con su población rápidamente, al punto que las autoridades se ven obligadas declarar a la ciudad en cuarentena y, para asegurarse que esta se cumpla estrictamente, ordenan cercarla con fuerzas militares a fin de evitar que la población no pueda escapar y llevar la enfermedad a otros lugares. Parece mentira, pero la literatura tiene la virtud de, no solo hacernos conocer hechos pasados, sino también de predecir el futuro, porque eso es lo que estamos viviendo en estos días.
Bien, nuestras abuelitas decían, con mucha sabiduría por supuesto, “no vale llorar sobre la leche derramada”, y tenían razón. Mejor revisemos brevemente lo que es necesario saber y hacer para enfrentar con éxito al terrible coronavirus. En primer lugar, debemos de estar al día con las últimas informaciones referentes al coronavirus, esto se puede encontrar visitando las páginas de las autoridades de salud de la ciudad o estado en donde reside, poner atención a los noticieros televisivos y radiales no es perder el tiempo en esta época. Además, es necesario partir de lo más elemental, la mayoría de gente que es infectada con el virus sobrevive, lamentablemente otros no van a tener la misma suerte, sobre todo los ancianos y aquellos que tengan problemas de salud, como diabetes, presión alta, problemas con la visión o cualquier otro mal que ponga bajas las defensas del cuerpo.
Para poder protegernos nosotros, a nuestra familia y a toda la comunidad debemos hacer lo siguiente:
Ahora bien, los padres tienen parte importante en este proceso educativo de emergencia. Aprovechando que, de una u otra forma, hay más tiempo para estar en casa, es necesario ver que sus hijos en edad escolar no desperdicien su tiempo pegados al bendito celular, aparatito que puede ser usado de manera positiva por una sencilla razón, es una computadora en miniatura y, por lo tanto, permite visitar sitios de interés cultural y educativo.
Antes de finalizar, no hay que desesperarse, tomen las cosas con calma, esto va a terminar. Háganlo por sus hijos y por ustedes mismos.
Armando Zarazú Aldave
[email protected]
En 1947, el genial Albert Camus publicó su novela titulada “La peste”. La historia está ubicada en la ciudad argelina de Orán, la cual es asolada por una terrible epidemia que va acabando con su población rápidamente, al punto que las autoridades se ven obligadas declarar a la ciudad en cuarentena y, para asegurarse que esta se cumpla estrictamente, ordenan cercarla con fuerzas militares a fin de evitar que la población no pueda escapar y llevar la enfermedad a otros lugares. Parece mentira, pero la literatura tiene la virtud de, no solo hacernos conocer hechos pasados, sino también de predecir el futuro, porque eso es lo que estamos viviendo en estos días.
Bien, nuestras abuelitas decían, con mucha sabiduría por supuesto, “no vale llorar sobre la leche derramada”, y tenían razón. Mejor revisemos brevemente lo que es necesario saber y hacer para enfrentar con éxito al terrible coronavirus. En primer lugar, debemos de estar al día con las últimas informaciones referentes al coronavirus, esto se puede encontrar visitando las páginas de las autoridades de salud de la ciudad o estado en donde reside, poner atención a los noticieros televisivos y radiales no es perder el tiempo en esta época. Además, es necesario partir de lo más elemental, la mayoría de gente que es infectada con el virus sobrevive, lamentablemente otros no van a tener la misma suerte, sobre todo los ancianos y aquellos que tengan problemas de salud, como diabetes, presión alta, problemas con la visión o cualquier otro mal que ponga bajas las defensas del cuerpo.
Para poder protegernos nosotros, a nuestra familia y a toda la comunidad debemos hacer lo siguiente:
- Lavarnos las manos frecuentemente con jabón y agua, entonado dos veces la primera estrofa de la canción que más nos guste, el hacerlo bien mata los virus que pueda haber en nuestras manos.
- Mantener siempre lo que se llama distancia social con nuestros interlocutores, un metro de distancia aproximadamente, debido a que, si alguien que está infectado, estornuda podrá expulsar el virus y será fácil que usted lo inhale al respirar.
- Evita tocarse los ojos y la boca. Las manos tocan cualquier superficie y por lo tanto se pueden contaminar fácilmente.
- Tratar de practicar higiene respiratoria, esto significa cubrirse la boca y nariz con un pañuelo o el brazo cuando estornuda, de esa forma protegemos a los que están a nuestro alrededor.
- Permanecer en casa si tiene fiebre y tos; si tiene dificultades de respiración busque atención médica y siga las direcciones de la autoridad de salud del área donde vive.
- Ahora bien, si usted amable lector ha estado en las últimas dos semanas en lugares a donde ha llegado el coronavirus debe hacer los siguiente:
- Permanezca en casa si comienza a sentir dolor de cabeza, y liqueo nasal hasta que se recobre, porque evitando contacto con otras personas y buscando auxilio médico, ayudará a luchar más efectivamente a proteger a otros miembros de su comunidad.
- Si tiene fiebre, tos y dificultad al respirar, busque ayuda médica tan rápido como le sea posible porque puede ser producto de una infección respiratoria o algo más serio y peligroso, digamos el coronavirus.
- Avise a su médico si ha realizado un viaje recientemente o ha tenido contacto con alguien que lo ha hecho, esto permitirá tomar las medidas necesarias más fácilmente.
Ahora bien, los padres tienen parte importante en este proceso educativo de emergencia. Aprovechando que, de una u otra forma, hay más tiempo para estar en casa, es necesario ver que sus hijos en edad escolar no desperdicien su tiempo pegados al bendito celular, aparatito que puede ser usado de manera positiva por una sencilla razón, es una computadora en miniatura y, por lo tanto, permite visitar sitios de interés cultural y educativo.
Antes de finalizar, no hay que desesperarse, tomen las cosas con calma, esto va a terminar. Háganlo por sus hijos y por ustedes mismos.
Armando Zarazú Aldave
[email protected]